25N. Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Las desigualdades y discriminaciones que sufrimos las mujeres son estructurales, hay muchas formas de ejercer violencia sobre las mujeres, unas son muy evidentes y otras no tanto, quedando invisibilizadas y pasando desapercibidas a pesar de ser constantes y continuas afectando de manera muy grave a una gran mayoría de nosotras. El sistema capitalista y patriarcal en el que vivimos, sustentado por el Estado, que es en esencia violento, ejerce múltiples formas de violencia contra las mujeres, perpetuando las desigualdades y no solo eso, sino a través de sus políticas fomentándolas, a pesar de disfrazarlas con” buenas intenciones” propuestas vacías de contenido, medidas estéticas, parches, planes de igualdad que sobre el papel lo aguantan todo pero que en la realidad hacen aguas. La precariedad, la brecha salarial, la falta de oportunidades laborales, la precarización continua de los sectores más feminizados, la falta de recursos, la falta de tiempo, la imposibilidad de conciliación, la dependencia económica hace que muchas mujeres que se encuentran en situación de vulnerabilidad no puedan escapar de las diversas situaciones de violencia que viven. Que a dia de hoy siga sin ratificarse el convenio 189 de la OIT sobre las trabajadoras del hogar, como se puede denominar? tener miles de trabajadoras sin protección ante los abusos y sin derechos es de una violencia escandalosa. Por todo esto y mucho más, las mujeres exigimos igualdad de oportunidades, en el ámbito social, económico y político denunciamos que la violencia machista que sufrimos las mujeres de múltiples formas son consecuencia directa del actual sistema capitalista y heteropatriarcal, el cual es consciente que sin el trabajo no remunerado sobre todo en los cuidados que realizan en su gran parte las mujeres el sostenimiento del sistema capitalista sería inviable. Vivimos en una sociedad que cuando no trafica con nuestra dignidad, explota nuestros sudores. 

EL PATRIARCADO NOS AFECTA A TODOS Y POR LO TANTO, TODOS JUNTOS HOMBRES Y MUJERES TENEMOS QUE EMPUJAR PARA ECHARLO ABAJO.
EL MAYOR AGRESOR, ES EL ESTADO OPRESOR.

 

Texto del grupo de feminismos de CNT-NORTE

 

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